Entorno
La propiedad cuenta con más de 280 hectáreas de las que la mayor parte son bosque de pino, robles y encinas. El resto son viñedos, campos de secano, un huerto orgánico donde son cultivados algunos de los productos para la cata. En su parte baja discurre el río Foix, que nace dentro de la finca y porta agua cristalina todo el año.
Dentro de las tierras hay algunas cabañas de piedra seca de la época de los templarios que pueden ser visitadas si vienes con zapatos adecuados.
Se incluye en todas nuestras experiencias un paseo por dentro de la propiedad, donde se habla de las hierbas autóctonas, naturaleza y curiosidades sobre la producción de vino y a solo 35 km del mar Mediterráneo, lo que le confiere además de las vistas únicas, un microclima muy especial.